Una fuerte tormenta provoca inundaciones y deja sin luz a una parte de Heros

La intensa tormenta de lluvia y granizo acompañada de fuerte aparato eléctrico que descargó en torno a las tres de la tarde de ayer sobre Avilés y comarca causó en apenas unos minutos fuertes inundaciones en calles, plazas, portales y bajos comerciales. Tanto fue lo que cayó en tan poco tiempo que la red de recogida de pluviales se vio desbordada. El agua manaba con fuerza de muchas alcantarillas, los charcos se extendían y el teléfono de la Policía Local no paraba de sonar, recibió unas 200 llamadas en menos de una hora.

El agua entró en los Juzgados, provocando que saltase la alarma antincendios, en la estación de autobuses, incluso hasta en el despacho de venta de billetes, y en numerosos comercios de Avilés. También en la vivienda ubicada en el número 4 del Camino Viejo de La Pedrisca, en La Carriona, anegando con más de un palmo de agua la planta baja. «Todo fue muy rápido. Cuando bajé el agua llegaba por encima de los tobillos», manifestó la propietaria, que apuntó a dos arquetas próximas como las causantes de la inundación. «Las tapas cedieron y el agua arroyó, y no es la primera vez que sucede. Además son fecales. Menos mal que paró casi tan rápido como comenzó, pero la planta baja quedó cubierta de excrementos y el olor era muy fuerte», dijo.

La zona de El Arbolón se inundó y también la plaza del Vaticano, la avenida de Los Telares y otras muchas calles: Rivero, Travesía de La Vidriera, avenida de Gijón, Llano Ponte... En Pruneda arroyaba, y lo mismo sucedía en Dolores Ibarruri, en El Quirinal, y en otras muchas calles y barrios de Avilés, como El Pozón.

Un rayó causó desperfectos en el transformador de Heros, dejando sin luz a los vecinos. También hubo apagones puntuales en otros puntos de la ciudad, como en La Carriona, y tres accidentes de tráfico sin mayores consecuencias, salvo para uno de los conductores implicados, que dio positivo en alcoholemia.

Herida en San Juan

En Salinas, la fuerza del agua levantó sendos trozos de asfalto en el cruce de Luis Treillard con San Martín y en Valboniel, un pequeño núcleo rural cercano a Piedras Blancas. En San Juan, la lluvia y el granizo provocó que una joven ciclista se fuese al suelo, sufriendo heridas de cierto alcance, no de gravedad. Fue trasladada en ambulancia al Hospital San Agustín. En las playas, los rayos obligaron a Salvamento a izar la bandera roja, pese a que el mar estaba como un plato.

La tormenta azotó con especial virulencia a Gozón. El agua se coló en la planta baja de numerosas viviendas y establecimientos comerciales. Según el concejal Manuel Alberto Martínez, en algunos llegó al medio metro de altura.

La estación meteorológica del Aeropuerto de Asturias recogió ocho litros y medio de agua por metro cuadrado en poco más de media hora, cantidad equiparable a la pluviosidad de todo un día de lluvia 'normal'. Hubo un segundo pico a la siete, tres litros y medio.

Los Bomberos activaron el estado de alerta máxima, aunque no llegaron a intervenir. En cuanto a la operativa aeroportuaria, la fuerte descarga eléctrica obligó a un avión procedente de Palma de Mallorca a volar en círculo durante tres cuartos de hora, hasta que la torre de control le dio luz verde para tomar tierra.

Una vez cesó la tormenta el agua se retiró casi tan rápido como había llegado, aunque en algunos casos las consecuencias se mantienen. A última hora de la noche buena parte de Heros seguía sin luz, y las previsiones más optimistas indicaban que en el mejor de los casos el suministro no se reestablecería hasta bien entrada la madrugada.