

Secciones
Servicios
Destacamos
LUIS FLÓREZ
Domingo, 12 de octubre 2014, 01:01
Lleva la magia en las venas y en las manos. Podría decirse que es magia en sí mismo ya que mezclar en un número humor, trucos y prescindir de la palabra hablada no es nada sencillo. Paulino Gil (Salamanca, 1960) acerca hasta La Pola su espectáculo 'Chekin', premiado en el campeonato mundial como mejor espectáculo de magia cómica.
¿En qué consiste la magia cómica?
En utilizar la magia mezclada con situaciones catalogadas dentro de lo absurdo, aparte de valerme de los gestos. Para mí es una mezcla de magia, humor y muchos 'gags' visuales. Hay muchos números que emplean la palabra, pero se olvidan de la gestualidad. Hay cierta inspiración en el cine mudo.
¿Cómo se consigue hacer humor sin emplear la palabra?
Radica en utilizar el resto de los sentidos: los gestos, las miradas... Tienen que estar muy sincronizados los gestos con la magia, además de la música y la coreografía. En este espectáculo somos dos sobre el escenario y hay mucha coreografía y mucha complicidad. Tampoco tenemos roles muy marcados dentro de la obra, lo que da cierta libertad.
¿Cómo consigue implicar al público en el desarrollo del espectáculo?
Es fundamental que la comunicación con el público sea constante, para mantenerlo enganchado. Para nosotros el público son las personas que residen en el hotel y que pueden intervenir en cualquier momento. Es un espectáculo muy singular en ese sentido.
¿Qué supone para un mago que reconozcan internacionalmente su trabajo?
En primer lugar, supone representar a tu país, lo cual es un honor. El jurado vio ocho veces nuestro espectáculo antes de dictaminar. Cuando te dan este tipo de premios supone un espaldarazo a tu trabajo, te motiva y te dice un poco por dónde tienes que ir. Te animan a seguir trabajando. La verdad es que los premios te dan una repercusión mayor entre el público y promotores, y desde que nos otorgaron este galardón nos llaman para realizar más espectáculos. Despejan las dudas del espectador, saben que van presenciar algo que merece la pena.
¿Cuándo supo que la magia sería su forma de vida?
Yo no soy consciente de ello. Mi madre decía que con 5 años trataba de imitar los trucos de los magos. Forma parte de mi forma de entender la vida, siempre relacionada con la magia. Comienzas haciendo trucos para los amigos y poco a poco vas tomándotelo más en serio. El objetivo es que el espectador se emocione y evolucionar continuamente. Decía Picasso que hay que «tener inspiración, pero que te pille trabajando».
¿Cuál es la situación de los magos en España?
Nuestro sector tampoco es ajeno a la crisis. Ahora estamos pasando por un momento dulce para la magia, aunque antes se consideraba un arte de segunda. El público se ha ido enganchando poco a poco.
¿Es verdad que un mago nunca revela sus trucos?
No tendría sentido ni para nosotros ni para el espectador, que busca sorprenderse con lo que ve. Si el público conoce el mecanismo pierde el interés.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.