La Mancomunidad se reúne para buscar solución a su futuro

La Mancomunidad del Cabo Peñas vive estas semanas uno de sus momentos más difíciles. Tras el anuncio por parte del alcalde de Gozón, Jorge Suárez, de que el concejo vecino había utilizado fondos del ente de forma irregular y la postura de la regidora de Carreño, Amelia Fernández, de abandonar la tesorería del mismo, el futuro de la entidad supramunicipal ha quedado en el aire. En este ambiente de crisis, la junta de gobierno volverá a reunirse hoy por la tarde para intentar buscar una solución a esta situación que ha enfrentado a los dos alcaldes socialistas.

Los puntos del día serán dos: el examen de la documentación solicitada y los escritos presentados así como la programación de las actuaciones a realizar. El objetivo es marcar una línea de trabajo a corto y medio plazo que permita salir al ente de la situación de estancamiento en la que está inmersa desde hace varios meses. En el último encuentro, celebrado el pasado 3 de abril, Suárez aceptó mantenerse como presidente del ente ante la petición de las agrupaciones de Somos y de Izquierda Unida de Carreño y Gozón. Cargo que aceptó con la condición de crear una junta local para buscar soluciones y alternativas. El de hoy será el primer paso en esta dirección.

El foco estará por la mañana en Candás, donde los portavoces de los grupos municipales están citados para una reunión propuesta por el grupo de IU. El único tema a tratar será la coyuntura actual que vive la Mancomunidad. La agrupación de izquierdas espera que el encuentro sirva para aclarar las explicaciones, aún confusas, realizadas por la alcaldesa de Carreño para defender su actuación en el supuesto uso indebido de los fondos del ente supramunicipal. La regidora afirmó que el dinero se había utilizado «conforme a ley y de acuerdo siempre con el Consistorio de Gozón».