Velas y música de violín en Candás

Tradición y religiosidad en Candás. La iglesia parroquial San Félix vivió una intensa misa del gallo, en la que los más pequeños de la villa candasina tuvieron un especial protagonismo.

Cerca de una quincena de niños, de cinco a diez años, entraron en el templo portando, los más mayores, velas encendidas. Y, los más pequeños, imágenes del Niño Jesús. Todos ellos realizaron una pequeña procesión por el interior de una iglesia que acogió a numerosos feligreses, más que en otros años, en esta misa tan especial que se celebra en la medianoche del día 24 de diciembre. Y es que, además, el párroco, José Manuel García, había instado a los fieles a que llevaran sus figuras del Niño Jesús para proceder, después, a su bendición.

Quienes acudieron a esta misa del Gallo, asimismo, pudieron escuchar la música que salió el violín de la niña Olaya Álvarez, quien interpretó varias piezas; entre ellas, el 'Adeste fideles' y 'Cerca de ti, señor'. Y, como no podía ser de otra manera en Candás, la mar tuvo su hueco en esta celebración. Los feligreses llevaron arena de la playa, por la mañana, que depositaron en un jarro de cristal. Allí fue donde, durante el oficio religioso, los niños colocaron sus velas.