Langreo abre su piscina, mientras la de Mieres lleva seis meses cerrada

Langreo estrena hoy su temporada de baño con la demandada y esperada apertura de las piscinas de Riaño. Será mes y medio de disfrute de las instalaciones de manera gratuita. Por su parte, las de Vega de Arriba, en Mieres, cumplen hoy seis meses clausuradas. El gobierno local no se da un plazo para su reapertura tras municipalizar el servicio.

Respecto al recinto langreano, el Consejo de Gobierno autorizó este miércoles la cesión a favor del Ayuntamiento de las instalaciones. Permanecerán abiertas hasta mediados de septiembre, a pesar de que el traspaso es hasta el día 30 del mismo mes. Sobre el siguiente paso, la cesión definitiva de las instalaciones, la regidora señaló que habrá que abordar el asunto en breve para que no quede enquistado el problema.

Una de las cabezas visibles del movimiento social que ha luchado por su apertura es Pablo Taberna. Portavoz de la plataforma, dice que aún queda una asignatura pendiente. «Todavía nos queda lograr la apertura de las de Pénjamo, y que se arregle todo esto», menciona en referencia a las instalaciones deportivas de Riaño. Reclama las obras de reparación integral del equipamiento prometidas desde las administraciones Local y Regional. Pero eso toca más adelante. «Vamos a continuar con la presión social, hablando con todos los grupos políticos. Queremos mentalizarlos de que es necesario que estén en funcionamiento las dos instalaciones», manifiesta.

Mientras, en Mieres, la situación es muy diferente. Aquí se parte de que el Ayuntamiento optó por municipalizar la gestión del recinto tras quedar desierto el concurso de explotación. Las piscinas echaron el cierre el 31 de diciembre, cuando culminó el contrato con la empresa adjudicataria. El portavoz de los socialistas, Armando Fernández Natal, advirtió recientemente que a los vecinos les esperaba «un verano caluroso». El concejal considera que el problema va a continuar y «que no tiene una pronta solución». Tilda de intolerable que se mantenga esta situación en un concejo como el mierense; «los vecinos no tendrán más remedio que ir a Turón o a Paxío para disfrutar de ese tipo de instalaciones. O salir del concejo». El socialista señaló que esta situación «es fruto de la improvisación y de la incapacidad del gobierno local de IU».

El ejecutivo municipal de Mieres, por su parte, no da plazos, aunque informa que ya está ultimando la licitación para la contratación de dos socorristas, necesaria para la reapertura de las piscinas. El vicealcalde, Manuel Ángel Álvarez, ya afirmó que las instalaciones abrirán de forma gradual, con preferencia de la piscina. El resto de servicios lo hará por fases y la contratación de monitores se hará en función de las necesidades.

El Ayuntamiento ya resolvió uno de los escollos para la apertura de las piscinas tras solventar el conflicto laboral suscitado por los traslados de personal entre los trabajadores municipales.