El PP urge «poner coto» al salario social, que exigió 101 millones en 2015

«Asturias es una de las comunidades menos eficientes en la gestión de sus servicios sociales». La conclusión figura en el último informe de la Asociación estatal de directores gerentes de servicios sociales, entidad que compara la inversión de cada región en la materia y su resultado. El estudio reconoce que pese a la crisis el Principado y los ayuntamientos incrementaron su gasto social, hasta los 361,13 euros por ciudadano. Es un desembolso 51,85 euros superior al que prodiga el resto del país.

El dictamen recomienda a Asturias «analizar su sistema de servicios sociales para detectar las circunstancias que limitan su eficiencia, teniendo en cuenta el ratio tan negativo que ofrece su importante gasto en este sector, uno de los más altos de España, y su limitada cobertura de prestaciones y servicios». Con el informe sobre la mesa, el diputado popular Matías Rodríguez Feito pasó ayer de los datos al reproche: «Todos los trabajadores contribuimos para ayudar solidariamente a quien lo necesita, pero ese esfuerzo no llega porque el PSOE lo emplea en mantener una Administración enorme y burocratizada, una pila de 'enchufados' que no sirven más que para empobrecernos a los demás».

El representante del PP destacó que «la mayoría de los recursos se van al salario social y así es imposible que el dinero alcance». Recordó Rodríguez Feito que en 2013 fueron 46 los millones dedicados a esta renta de inserción, suma que el pasado ejercicio aumentó hasta los 101. «Lo peor de todo es que no saben cómo ponerle coto al incremento de la factura del salario social», afeó. «No hay dinero para dependencia, discapacidad, mayores, residencias ni teleasistencia, no hay para nada porque prácticamente todo se lo lleva el salario social y el personal de la Administración autonómica», indicó.

Rodríguez Feito criticó que existan beneficiarios cobrando la paga «desde su implantación, como si fuera una renta vitalicia; no pueden seguir arruinando a los trabajadores para malgestionar. Lo que Javier Fernández hace con el salario social es inadmisible y una injusticia con los trabajadores que cobran poco más de 1.000 euros». El popular aseguró que «nadie entiende que se pague de por vida a alguien con la única condición de no trabajar, nadie va a ponerse a trabajar si se lo lleva gratis a casa».

El pasado noviembre el salario social tocó techo, con 18.388 beneficiarios en cuyas cuentas el Principado ingresó 8.956.104 euros. El 22% de los asturianos que están bajo el umbral de la pobreza perciben así 487 euros para salir al paso. La propia consejera de Derechos Sociales, Pilar Varela, ha reconocido que urge mejorar el mecanismo. En estos momentos por ejemplo recibir una oferta de trabajo puede resultar perjudicial para un beneficiario del salario social, pues aunque el contrato sea temporal y por poco dinero, pierde la paga y cuando vuelva al paro tardará meses antes de recuperar ese derecho. Varela ha prometido modificar la normativa para evitar esta paradoja. El diputado del PP juzgó que en la actual situación «el resultado es claro, nadie va a ponerse a trabajar si se lo lleva gratis a casa».

Ultimátum a la reforma

Los profesionales estiman que por cada receptor del salario social hay en realidad 2,2 familiares que salen adelante gracias a esos 487 euros. En total en Asturias habría 50.000 personas tirando de esta renta «y al PSOE lo que menos le preocupa es su proyecto vital y su inserción laboral, lo que quieren es fidelizar su voto», criticó el diputado tinetense.

El informe de los gerentes urge también al Principado a renovar la Ley de Servicios Sociales, que data de 2003 y cuya reforma también comprometió Varela al inicio de la legislatura. El PP puso ayer premura, ofreciéndose a participar de la iniciativa pero advirtiendo que «si el Gobierno regional no presenta un anteproyecto antes de que acabe el año, tenemos órdenes de nuestra presidenta de hacerlo nosotros».