«Sanidad deja a un lado los trastornos mentales graves»

La forma en que fue elaborado el nuevo Plan de Salud Mental, sin participación de los profesionales y sin dar tampoco publicidad al proceso, es lo que ha concitado más críticas entre los diferentes expertos consultados. «Nadie sabe quién lo ha redactado. Tampoco por qué se elabora, ya que había uno en vigencia hasta 2016», aseguró Víctor Aparicio, miembro de la Asociación Española de Neuropsiquiatría. Este psiquiatra, que acudió a la presentación convocada por Sanidad el pasado martes, echa en falta una realidad «importante, sobre todo en Asturias, y que el plan ni siquiera menciona, como es el envejecimiento y el peso de las demencias».

Julio Bobes, jefe del servicio de Psiquiatría del HUCA, calificó el documento de «paracaídas e impuesto de arriba a abajo». Bobes considera que el plan «deja de lado los trastornos mentales graves. Está muy bien lo de la psicoterapia, pero lo que debe hacer Sanidad es fijar prioridades y los trastornos mentales graves no parecen ser la suya».

Precisamente, hoy, el consejero de Sanidad comparecerá en la Junta los planes de su departamento para los Equipos de Tratamiento Asertivo Comunitario (ETAC) que funcionan en Oviedo y Avilés y sobre los que, según los profesionales, se ciernen recortes y posiblemente, su desaparición. «Existe tensión entre los equipos y Sanidad no parece querer resolverlo», lamentó Aparicio. Bobes, por su parte, dijo que «hay que hablar con resultados sobre la mesa» y aconsejó la realización de evaluaciones externas, a la vez que recordó que el Reino Unido cerró en 2006 los 214 ETAC que tenía. «Habrá que preguntarse por qué». Finalmente, Pilar Saiz definió el plan de Salud Mental como «el mismo perro con diferente collar» y alertó sobre merma de personal.