El consejero lamenta que los fallos de los primeros días se conviertan en un «mantra»

El consejero de Sanidad, Faustino Blanco, alabó ayer en una visita al HUCA con colectivos vecinales y de enfermos del Área IV los beneficios de las nuevas instalaciones, de un proyecto «magnífico» que «va a ser imparable», vaticinó. Pensado «con la máxima ambición», cuenta con «la mejor tecnología» y debe ser, añadió, «una oportunidad de una nueva economía vinculada al conocimiento y a la sanidad». Reclamó «poner en valor lo que significa, en lugar de poner el acento en lo que se está haciendo mal, porque trasladamos un mensaje de frustración». Lamentó que los fallos de los primeros días se estén convirtiendo en un «mantra» poco útil para el complejo sanitario.

El gerente del Área IV, Jaime Rabanal, pidió, por su parte, «un poco de paciencia para comprender los problemas que nos plantea» un traslado de las características de éste y la puesta en funcionamiento de un nuevo sistema informático. A su vez, el director de Asistencia Sanitaria, Antonio José Álvarez, avanzó que «en 15 días» el HUCA «alcanzará velocidad de crucero», y que «en los primeros días de octubre tendrá una actividad absolutamente normal tras la época estival», cuando no se superarán los 750 pacientes ingresados.