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ELCOMERCIODIGITAL
Sábado, 22 de enero 2011, 22:51
Existen todavía altos cargos de la jerarquía nazi que viven en nuestro país. Un caso sangrante fue el de Hauke Pattist, fallecido en 2001 en Langreo y que se paseaba por Ribadesella y Oviedo. Los investigadores Manuel Carballal y Clara Tahoces lo localizaron a finales de los años 90. La justicia holandesa lo buscaba por crímenes de guerra. En 1946 había sido condenado a cadena perpetua como culpable de la detención de más de 2.000 judíos en Amsterdam, muchos de los cuales fueron torturados o asesinados.El suyo no es un hecho aislado. Otro caso de actualidad es el de John Demjanjuk, de 90 años. El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha solicitado a la Justicia alemana su entrega para que sea investigado como cómplice de los delitos de genocidio o lesa humanidad que se produjeron en el campo de concentración de Flossenbürg (Alemania) entre 1942 y 1945, en el que fueron confinados 155 españoles, 60 de los cuales perdieron la vida. El suplemento V, que se entrega con EL COMERCIO y LA VOZ DE AVILÉS, explica la llamada 'Last Oportunity Operation', un intento del Centro Wiesenthal por localizar a los últimos asesinos vivos nacionalsocialistas.
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